Este sencillo libro expone algunos procesos de pensamiento básicos necesarios para estructurar una historia sencilla y convertirla en una novela juvenil. Fomenta el pensamiento libre, el disfrute y el orgullo de ser autor. Hay suficientes retos para tentar a un joven autor, pero sin reglas rígidas. Incluso sugiere ignorar los consejos del libro e improvisar en su lugar.

Las maravillosas fantasías de los niños suelen perderse en el mundo, a menos que las escriban.

Para ello, escribir debe ser divertido. Este libro hará sonreír a los niños, y algunos de ellos se pondrán manos a la obra.